Ya no existe motivación para continuar esta difícil tarea de vivir.
Difícil tarea, ya que muchas veces no se vive sino que se sobrevive, sin ilusión, sin motivación, de una forma monótona y negativa, donde solo el fracaso tiene verdadero sentido.
Matrimonios destruidos, hijos en la cárcel por causas de la violencia de la droga, producto de una vida desordenada, y a todo esto se une nuestra condición laboral, que como muchos en este país y en este mundo ya no tienen ni lo básico para poder suscitar.
Sin fe, sin consuelo, sin esperanza, y peor aun si se ha conocido a jesucristo, como nuestro único y exclusivo salvador y miramos atrás, y esa vida que empezaba a tener sentido ahora es peor incluso que antes de que jesucristo entre en nuestras vidas.
En esos momentos es cuando tenemos que meditar en el precio del amor, nos dice la biblia.
De tal manera amo dios al mundo para que todo aquel que en la crea no se pierda, mas tenga vida eterna.
Si en esos instantes permitido que el espiritu santo entre en nuestras vida y ponga orden , un precio muy caro ha pagado jesus por cada uno de nosotros, el castigo de nuestra paz fue sobre el y por sus llagas fuimos nosotros curados, un precio altamente caro pago nuestro salvador por nosotros.
Nunca amaras demasiado, si no amas lo suficiente, y ¿qué es amar lo suficiente? Amar aunque no te amen, perdonar aunque nadie te lo pida, dar, sin esperar nada a cambio, estar dispuesto siempre ha hacer el bien, aunque siempre recibas males, esforzarte siempre a favor de los demás, aunque siempre lesivas criticas y menosprecio, ser mansos y humildes de corazón, aunque te persiga siempre la violencia, no pongas tus condiciones , siempre coloca la obra del señor en primer lugar, y nunca coloques tus intereses primero, ama hasta tus enemigo, dale amor, recuerda esto, con amor hasta los malo mejoran, pero no espere que ese amor te lo devuelvan ya que ese tipo de interés no es provechoso.
El mor es benigno, no tiene envidia, no es jactancioso no se envanece no busca lo suyo, le gusta la justicia, habita donde hay un corazón piadoso y misericordioso, procura amar siempre y nunca pidas que te amen, que con el tiempo te darás cuenta que estas sembrando en otros corazones y ese amor te lo devolverán algún día.
Nunca dejes que tu corazón se llene de tus pensamientos, ya que nuestros pensamientos no son los del señor, una vida llena del amor de dios, es una vida que sabe esperar en el, recuerda que muchas veces el precio del amor de dios , es el rechazo, el menosprecio, el abandono de aquellos que ama, pero a su tiempo segaras si no desmayas, irán andando y llorando los que llevan la preciosa semilla, mas volverán con regocijo trayendo sus gavillas, el resultado es para el señor, siembra en corazones de marmol, con amor los hablandaras.
Es un precio muy caro, pero lleno de la gloria del señor.
